Juan Martín del Potro cayó ante Roger Federer, en la final del ATP 500 de Rotterdam, quien obtuvo su 71º título gracias a parciales de 6-1 y 6-4 y no pierde un encuentro contra el argentino desde la final del US Open 2009.
El tandilense no pudo hacer demasiado frente a su rival, ex número uno del mundo y actual tercero del ranking ATP, y sucumbió en dos sets sobre el cemento indoor holandés. Una hora y 26 minutos duró el 11º choque entre estos contendientes, de los cuales 9 quedaron en manos de uno de los máximos exponentes de la historia del tenis.
Del Potro había tenido un recorrido prácticamente fulminante, al vencer a casi todos sus contricantes en sets corridos y con gran facilidad (Michael Llodrá fue el único al que tuvo que derrotar en tres mangas). De hecho, su victoria en las semifinales, por 6-3 y 6-1 frente al checo Tomas Berdych, significaba una gran cuota de jerarquía para la ilusión de una final más luchada. Sin embargo Federer, a quien no le había resultado nada fácil su pleito con Davydenko (4-6, 6-3 y 6-4 en poco más de dos horas de juego), exhibió el nivel superlativo de otras tantas veces y resolvió la contienda a su modo.
Federer no se ha quedado sin un título ATP en 12 temporadas consecutivas. A pesar de un trayecto más peleado que el de Del Potro, se repuso en el partido decisivo y eso puede representar un importante paso para recuperar el primer puesto del ranking oficial, aunque aún falte mucho por jugarse. Del Potro todavía no puede obtener una corona desde mayo de 2011, pero demuestra que su nivel va en aumento y, con ello, las esperanzas de verlo en su mejor versión.
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